Seguramente hay muchos títulos en la historia de los videojuegos que podrían optar a este título, pero ninguno de ellos se ha hecho tan famoso y fue tal fracaso de ventas como el juego de Atari E.T. the Extra-Terrestrial (E.T. el Extraterrestre).
E.T. the Extra-Terrestrial es un videojuego de aventura desarrollado y publicado por la legendaria compañía Atari, Inc. para su consola Atari 2600. Está basado en la película del mismo nombre dirigida por Steven Spielberg y fue diseñado por Howard Scott Warshaw.
El objetivo del juego es encontrar tres piezas de un teléfono interplanetario. Dichas piezas están repartidas por distintos agujeros. El jugador dispone en pantalla de una barra de energía, que disminuye cuando E.T. lleva a cabo cualquier acción (incluyendo moverse, teletransportarse, caer a un agujero, así como levitar para salir de él). Para evitar esto, E.T. puede recoger Reese's Pieces (una conocida marca de caramelos americana), que puede usar para recuperar energía. Cuando se consiguen 9 de estos caramelos, E.T. puede llamar a Elliot para obtener una pieza del teléfono. El juego está dividido en seis entornos, representando cada uno una situación diferente de la película.
El desarrollo comenzó en julio de 1982 y se completó antes de finales de año. El coste total de la producción se estimó en 125 millones de dólares. Tras el gran éxito de la película E.T.: El extraterrestre Steve Ross, CEO de la compañía madre de Atari, Warner Communications, entabló conversaciones con Steven Spielberg y Universal Pictures para obtener los derechos necesarios para producir un videojuego basado en la película.
Warshaw intentó hacer del juego una adaptación innovadora y Atari pensó que cosecharía numerosas ventas dada su conexión con la película, que era muy conocida por todo el mundo. Cuando Warshaw y otros ejecutivos de Atari presentaron el proyecto a Spielberg, este no expresó ningún entusiasmo. Spielberg le pidió crear un juego similar al Pac-Man de Namco, sin embargo Warshaw pensaba que era un diseño de juego muy común, y prosiguió con su idea, que esperaba que capturara la sentimentalidad de la película.
Aunque el juego se vendió bien (es el octavo cartucho más vendido de Atari de todos los tiempos), sólo se vendieron 1.5 millones de los 4 que se fabricaron. A pesar de las razonables cifras de venta la cantidad de producto que no se vendieron junto al gran desembolso por la licencia de la película hizo que el título fuese un gran fracaso comercial para Atari. Este juego fue uno de los factores que llevaron a la bancarrota de Atari, que registró unas pérdidas de $536 en 1983 y causó su división y venta en 1984. También fue uno de los principales causantes de la gran crisis que sufrió la industria de los videojuegos a principios de la década de los 80. Más info:
Historia de los videojuegos, la década de los 80En septiembre de 1983, el Alamogordo Daily News de Alamogordo, Nuevo México informó en una serie de artículos que entre diez y veinte camiones cargados de cartuchos de Atari del almacén de El Paso fueron enterrados en el vertedero de la ciudad. Atari dijo que la razón de que lo enterrasen fue que iban a cambiar de juegos de 2600 a juegos 5200 debido al exceso de mercado negro, pero esto fue puesto en entredicho más tarde por un trabajador que dijo que no era así. El trabajador de atari Bruce Enten declaró que estaban enviando cartuchos rotos y devoluciones a Alamogordo y que era porque eran “inoperativos”.
El 18 de septiembre de 1983, el The New York Times informó del vertedero de Atari en Nuevo México. Un representante de Atari confirmó la historia y dijo que el inventario descartado provenía de la planta de Atari en El Paso, que iba a ser cerrada para convertirla en un centro de reciclaje. El artículo del Times no sugería el nombre de ningún título en concreto, pero más tarde se ha asociado la historia del vertedero con el fracaso de E.T.. Además, el titular “City to Atari: 'E.T.' trash go home” de una edición del Alamogordo News sugiere que los cartuchos eran de E.T. En consecuencia, se ha supuesto que muchas de las copias no vendidas de E.T. acabaron en este vertedero, aplastadas y cubiertas por hormigón.
La historia de los cartuchos enterrados pasó a ser una conocida leyenda urbana que llevó a alguna gente a creer que no es cierta. En 2004 el propio Warshaw expresó sus dudas de que se destruyeran millones de copias de E.T., apostando en cambio porque Atari hubiese reciclado las partes para ahorrar dinero. Sin embargo el día 26 de Abril del 2014 un conjunto de investigadores financiados por Xbox Entertainment Studios desenterró varios cientos de copias del juego en Alamogordo, dando por concluida la búsqueda y quedando comprobado el entierro de estos juegos por parte de Atari. Más info:
E.T. el videojuego, la leyenda urbana enterrada en el desiertoEl videojuego E.T. the Extra-Terrestrial se convirtió finalmente en un título mítico en la historia de los videojuegos aunque no precisamente por los motivos que se esperaban de él. Actualmente está totalmente descatalogado y se puede encontrar en libre distribución como Abandonware. Para quien tenga la curiosidad de probarlo puede jugarlos desde aquí:
E.T the Extra-Terrestrial , el videojuego